lunes, 8 de julio de 2013

1º Festival de Cine Transcinema: Arraianos, de Eloy Enciso y Los Ilusos, de Jonàs Trueba.

Por: Gisella Gastiaburù Barthè. 

Los ilusos , de Jonás Trueba . (España).

El joven director define este trabajo como "una película sobre el deseo de hacer cine, o sobre lo que hacen algunos cineastas cuando no hacen cine; sobre perder el tiempo y el tiempo perdido; sobre conversaciones, borracheras, comidas y rutinas; sobre los paseos al salir del cine; sobre estar enamorado; sobre estar solo y estar con amigos, construyendo futuros recuerdos para una película futura". Golpeando las diferentes fórmulas existentes de hacer cine, "Los ilusos" es una película experimental hecha por gente que tenía ganas de hacer cine y que convierte Madrid en un escenario cinematográfico. Una película cuyo discurso se arma a través de especulaciones, demostrando que  las circunstancias cotidianas, habladas de manera normal, también es cine.


Un ensayo fílmico que durante 93 minutos invita al espectador a reflexionar sobre el paso del tiempo, el transcurso de la vida, tomando como ejemplo el rodaje de una película de entretiempo que no depende de nada ni de nadie. Realizada en los huecos de agenda que los actores e integrantes del equipo tenían, "Los ilusos" se completa tras varios meses de trabajo sin planes de rodaje concreto y sin haberla escrito previamente.

Arraianos , de Eloy Enciso. (España). 

Se puede resumir su habilidad para integrar en el relato cinematográfico a una comunidad rural, cuya memoria, tradición oral y formas de vida perviven y dialogan con el presente. Arraianos’ (palabra gallega que se podría traducir como ‘fronterizos’) se presenta como “el retrato de una comunidad rural en su obstinada resistencia a desaparecer”. Sus habitantes viven su día a día e interpretan su propia vida mezclada con diálogos de ‘O bosque’, una obra del escritor Marinhas del Valle. “Realidad, mitos y sueños se confunden, al tiempo que aparece un extraño anunciando una profecía. 


En este sentido, la identidad geográfica a la que hace referencia el título (los arraianos, habitantes de la frontera galaico-portuguesa) es un pretexto para hacer un film fronterizo en el sentido de la dualidad entre realidad e imaginación: lo que se imprime en la memoria como una mezcla de realidad y la construcción mítica de esa realidad”.


EL DIRECTOR DIJO:“Quería hacer una película de frontera y en la frontera. Una película en la que se pudiese escuchar y tocar el idioma como nunca antes en el cine gallego y que me permitiese radiografiar esa dualidad identitaria que encarnan las dos mujeres que abren la cinta, entre el existencialismo y el descreimiento. Retratar el silencio, el verde, la humedad, la superstición, la maldición de la lluvia, el trabajo, la relación entre el hombre y el animal”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario